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Fea

De pequeña aprendió a resistir el rechazo. Correteada de cuanta casa, escuela o transporte por donde pasaba, su vida se redujo al único objetivo de sobrevivir. Nunca supo de cumpleaños ni días especiales. Ha sido perseguida, a veces con violencia. Interesada en conocer si en otros países las que son como ella corren la misma suerte, ha investigado el asunto. Se ha enterado que sí: que en los cuatro puntos cardinales le esperan gestos de repudio, palabrotas y golpes letales. Entonces duda si quedarse o partir. Al final optó por seguir en tierra conocida. En su fragilidad está dispuesta a vivir sin comodidades, pero los fuertes se la hacen difícil. En su presencia siempre arrugan la cara y levantan las manos para que se vaya. “¡Fuera de aquí, sucia!”, es el mensaje que lee en los rostros de hombres y mujeres, sin importar apellidos ni clases sociales. Ha sido expulsada de comisarías, iglesias y del Palacio de Gobierno. Atribulada, pero sin resignarse a su realidad, aprendió el lenguaje de los demás. Necesitaba comprender el motivo del hostigamiento diario que padece desde cuando fue parida. Lo logró. Detrás de una ventana escuchó cuando una abuela instruía a su nieta: “mi niña, no llores. La maté por inútil. Y tú deberías hacer lo mismo. Puedo tolerar muchas cosas, pero jamás una mosca”. 

Comentarios

  1. La mate por inútil. Ahí se me pararon los pelos…
    Pero conociendo el autor…súper.
    Felicidades. Queremos más

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  2. "Por qué nos conmueve
    más la poesía que la realidad"

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  3. Es un relato bien escrito pero que a mí me funciona poco y nada. Fue muy previsible para mí desde el principio porque he leído varios del mismo tipo. Así que se me hizo muy reiterativo. Además no me va lo de medio humanizar insectos (es medio, porque no habla, por ejemplo). Pero, dentro del tipo (que no es nada interesante para mí) está muy bien armado, creo que en particular por lo corto. Dándole de ese modo el perfil que realmente tiene, o sea el de una anécdota.

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